MI DROGA ES EL OXÍGENO
Me he reunido con muchos médicos. Especialistas de todo tipo de extensiones de nuestra diabetes, y cada uno cuenta las cosas como las ve. Pero en lo que coinciden es en que nada se sabe, pero todo se intuye, cada cuerpo es un mundo, y cada paciente presenta un cuadro distinto, desde sus sentimientos hasta la cantidad de insulina, porque todo cuenta.
Si bien, hay un claro corporativismo en la clase médica, y, si no que pregunten a los dentistas, es verdad que cuando los médicos ven que otros te vacilan, te lo suelen decir. Pero, ¿qué es vacilar?... Siempre les pregunto: ¿cuánto puedes estar sin comer? Y más menos hablan de tres semanas; y, ¿sin beber? coinciden en una semana aproximadamente; y, sin respirar… aquí todos se ríen… Claro, lo que los seres humanos necesitamos es lo que nos oxida y nos mata, pero a la vez nos mantiene aquí.
Los seres humanos inhalamos entorno a un 25% de oxígeno en cada inspiración. Con la medicina hiperbárica nos entra un 99% de oxígeno a través de las vías respiratorias superiores, invade nuestro cuerpo, y a través de nuestra piel entra otro 99%, con lo cual las marcas, las heridas… He visto curar un pie de diabético con una combinación de células madre y medicina hiperbárica, tengo las fotos y el testimonio de nuestro amigo, que lo padeció, y hoy juega al fútbol con su hijo pequeño.
Y, como quiero joderles el negocio a los que quieren vivir de nuestras provocadas enfermedades, pues me dedico a contarles a los que pueden apostar, que lo hagan por curarnos, porque cura hay, seguro. El negocio no es sanar, es hacernos crónicos. Gasto más de 600 euros al mes, porque me resisto a pedir recetas cuando lo puedo pagar, hay que tener conciencia solidaria real.